El Bulli ha cerrado, realmente lleva meses chapao. Menuda noticia!. Y cuando un negocio cierra es por algo inexorable, los balances no son satisfatorios. No es cosa sentimental, como se nos quiso vender. Unas docenas de personas aguardando expectantes los inconmprensibles conjuros taumatúrgicos del chamán acompañados de danzas mistéricas. El cierre del Bulli por tanto, no es la noticia, pero es un síntoma de algo que más abajo mencionarè o sugeriré.
Pero Ferrán, que representó a un pais que no es el suyo en una Bienal de Arte, que para mí no es lo suyo. Ferrán no puede estar callado, sabe que los que aguardamos años pacientemente por una mesa, CREEMOS en él...y en su experiencia. Y, regularmente se aparece....manteniendo vivo el misterio. Y su ego le impide pasar desapercibido. Aunque ya no haya negocio, él tiene que vender algo y sabe que lo sigue una multitud que compra lo que sea.
Porque Ferrán se reinventa (vaya ud a saber qué es eso!) desaparece y aparece, por ejemplo en una coctelería, consciente de su esencia de valioso fetiche, de vendedor (con lo que insiste en su catalaneidad) que va imantar a cientos de incondicionales de la farándula que prefieren verse muertos antes que sencillos. Es un fenómeno (no digo experiencia) religioso de masas. Es fé . Ferrán extiende su mensaje a los neófitos y todos se rinden a sus encantos. Las fèminas exhalan: QUEREMOS UN HIJO (por lo menos) TUYO.
Efectivamente no se puede negar que aportó cosas a la cocina, perdón, a la nouvelle cuisine que creemos trasunto de la conocida como nouvelle vague. Al menos como eso se nos vende. Ciertamente aportó. Podemos sintetizar sus aportaciones en que dió importancia al hecho de estimular las glandulas gástricas con una descripción poética y versificada, salpicada (no liofilizada) por apuntes de procedencia geográficos de lo que vamos a deglutir. Podemos caer seducidos por la descripción, pero esta puede ser no cierta, pero una de las conquistas del arte es engañar a los sentidos. Pero ya te cayó la gorda.
Pero algo está cambiando, le preocupa al maestro el menú de la última cena. No me imagino al Nazareno
y al Colegio Apostólico discutiendo sobre el menú, pero yo soy incapaz de elevarme de la cotidaneidad.
Pena es que tanto él como sus acólitos desconozcan la suerte de la trattotia que trataron de poner en la Roma renacentista los soberbios Sandro Botticelli y Leonardo, geniales en su arte pero a los que no se la consiguieron meter a sus paisanos en temas culinarios. Alguno se enfadó y es lógico
Acepto me llaméis ignorante en lo de la nouvelle cuisine, pero en lque acabo de decir no. Y recuerdo al que osó cuestionar este modus operandi fue condenado a una cruel danmnatio memoriae eterna. Santiago Santamaría a cuya memoria dedico esto.
La última observación que voy a hacer concierne a la turbamulta de razas que siempre LO acompañan, o LO siguen por todas partes. Les cuento una intuición: todos pagan por...el prestigio que da estar con Ferrán...en un sitio como Lugo donde se atreven a preparar una ensalada con tomates de Transilvania, habiendo a 12 km de aquí, en Castro los mejores tomates raff. Menos mal que estaba con dos señoritas, sino desenfundaba. El nacho aprovecharía para llamarme insensible ignorante. Pero con el ruído de la refriega no lo oiría. Es que noto que se ríen de mí. Serán paranoias!!.Soy un malfodido galego.
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